Los niños refugiados de Myanmar han comenzado a asistir a clases en las escuelas del estado de Mizoram, en el noreste de la India, superando las barreras del idioma y la miríada de otros obstáculos a los que se enfrentan mientras intentan continuar su educación y reconstruir sus vidas en una tierra extranjera.
Más de 350 niños refugiados se han unido a las aulas en los distritos del extremo oriental de Champhai y Hnahthial después de escapar del conflicto civil en curso en Myanmar, que se desató tras un golpe militar en febrero.
“Mi escuela ha inscrito a 45 niños, lo que supera en número a nuestros estudiantes actuales. Estamos haciendo todo lo posible para que estos niños se sientan como en casa ”, explica a Córdoba NoticiasLaltanpuia Khawlhring, directora de Thingsai Primary School-IV. EFE