Zaragoza (EFE).- Tras cinco legislaturas en el Parlamento aragonés y de haber sido alcalde de su pueblo, Ateca, el presidente de las Cortes, Javier Sada, no repetirá en las listas del PSOE en las próximas elecciones del 28M, unos comicios en los que esperan que el PP no fagocite a todo el centroderecha, porque “no sería bueno”, y en los que confía, como militante y amigo, que Javier Lambán repita en la Presidencia de Aragón.
Nacido en Zaragoza el 2 de abril de 1956 y médico de profesión, Javier Sada admitió en una entrevista con Córdoba Noticiasque de todos los puestos políticos que ha ocupado, desde diputado “de a pie” a portavoz de su grupo parlamentario pasando por la Presidencia de las Cortes, el de más “relumbrón”, del que más orgullo se siente es haber sido alcalde de su pueblo.
Pregunta.- Ha dirigido el Parlamento en una de las legislaturas más complejas, con pandemia, guerra, inflación desbocada, grandes incendios ¿cree que los diputados han estado a la altura?
Respuesta.- Sí. Los diputados siempre están a la altura, son ellos los que deciden el nivel del debate y lo que se tiene que debatir. Yo creo que si.
“De momento, no se ha perdido el respeto”
P.- ¿Cree que el tono de las sesiones de control se ha contagiado de la crispación política nacional?
R.- Se ha contagiado un poquito, pero con algunas diferencias importantes: primero, no se ha perdido el respeto, de momento, hacia el otro, y segundo, el presidente ha tenido la última palabra y se acata. Es normal que suba la vehemencia, pero hasta ahora no ha pasado de eso.
P.- ¿Ve al popular Jorge Azcón presidente de Aragón o cree que repetirá Javier Lambán?
R.- ¿Cómo voy a decir lo contrario? Creo, espero y deseo que repita Javier Lambán, no tanto como presidente de las Cortes, sino como militante del PSOE y además, amigo.
“Que existe el centroderecha es bueno para el país”
P.- ¿Cree que el PP fagocitará a todo el centroderecha?
R.- No sería bueno. Que el centroderecha existe es bueno para el país y debería ser bueno también para el PP y para el PSOE. Por lo tanto, es mejor no andar fagocitando cosas que, desde luego, a medio plazo pueden ser perjudiciales.
P.- ¿Se imagina un Parlamento con nueve partidos?
R.- ¿Por qué no? Parecía imposible con siete en la legislatura anterior, y no pasó nada, y esto, con ocho, también se ha podido funcionar sin ningún problema. Pues con nueve, tampoco tenemos que haber ningun problema. Pero serán los ciudadanos los que tomen esa decisión.

“Nunca me ha gustado la política-ficción”
P.- ¿Será Teruel Existe el nuevo clavillo del abanico?
R.- Los ciudadanos decidirán. I don’t know. A mí la ficción política nunca me ha gustado. La realidad es con la que se tendrán que enfrentar los que estarán en ese momento en el parlamento y con ella tendrán que jugar los distintos pactos.
P.- ¿Ve posible que exista un acuerdo del PSOE con Teruel después de una legislatura de ataques?
R.- Política ficción no he hecho nunca en mi vida, pero vuelvo a repetir que el PSOE y Javier Lambán han demostrado que se pueden hacer alianzas muy diversas y muy transversales.
P.- ¿Qué le parece que Aragoneses, liderado por una crítica del PAR, Elena Allué, se integra en las listas del PP?
R.- Como presidente de las Cortes no suelo dar opiniones sobre los diferentes movimientos en grupos. Creo que es mejor respetar cada una de las iniciativas políticas que hay, los huecos políticos que hay. Hasta ahora, intenté fagocitar a otro grupo en la historia de Aragón, y ha pasado casi de todo, no ha funcionado.
P.- ¿Comparte con su líder que militantes de un partido que concurran con otro es transfuguismo?
R.- Eso es lo que marca la ley de transfuguismo.
P.- ¿Cómo se justifica el fichaje de un concejal de Ciudadanos como candidato del PSOE a la alcaldía de Fraga?
R.- Eso, la ley de transfuguismo; vuelvo a repetir, como presidente de las Cortes no he hecho nunca opinión política.
La importancia del papel institucional
P.- Pero ahora que se va quizás se puede permitir ese lujo.
R.- Cuando me vaya lo haré, no tenga duda. Yo no era independiente, era de un partido político y votaría con el partido, pero me creo el papel institucional. Si se quiere que se tenga respeto por una institución, y por algo tan importante como la Presidencia de las Cortes, tiene que ser también respetando el papel institucional. Por lo tanto, se tiene que ser especialmente prudente. En su momento lo haré, y lo haré con mucho gusto.
P.- ¿De qué se siente más orgulloso como político?
R.- En principio, de la alcaldía. Y ojo, no era profesional. Yo tenía mi trabajo y luego me ocupaba de la alcaldía. Desde luego, no hay nada parecido a ser alcalde de tu pueblo. Más relumbrón e importancia tiene en la política aragonesa ser presidente de las Cortes, evidentemente, pero de lo que me encuentro más orgulloso es de haber sido alcalde de Ateca.
P.- ¿Entre presidente de las Cortes y portavoz del PSOE, qué elige?
R.- Son momentos diferentes. La política parlamentaria de verdad es la portavocía. Cuando llegué a la Presidencia de las Cortes comenté que lo fundamental era no ser noticia. Si no eres noticia es que estás haciendo bien tu papel de moderación, de buscar lugares de encuentro.
P.- Como médico ¿cómo ve la situación de la Sanidad?
R.- Todas estas cuestiones hay que verlas con perspectiva. Como médico no he opinado nunca de la sanidad, porque en ella lo importante no son los médicos, son los usuarios. Si opino como médico tengo una pequeña visión de la sanidad, no la totalidad. Pero voy a poner un ejemplo. Hace 40 años había en mi pueblo un médico que tenía que estar 24 horas, ahora hay un centro de salud para dos mil y pico habitantes con 24 horas de enfermero y de médico de servicio de urgencias permanente. Por lo tanto, no es comparable.
P.- ¿Le hubiera gustado estar en primera línea sanitaria durante la pandemia?
R.- No me hubiera importado. Pero creía que mi papel fundamental era que las Cortes, que es donde están representados todos los ciudadanos, no se cerraran ni un día. Estuve viniendo todos los días de la pandemia, con algún otro diputado y cuatro o cinco personas que trabajaron aquí. Había que mandar un mensaje a la sociedad de que el sitio en el que están representados ciudadanos los no solamente estaban preocupados, sino ocupados en intentar hacer frente a esa situación, que era muy crítica.
P.- ¿Ha sido el momento más complejo de su vida política?
R.- Sin dudarlo, no de la vida política, de la vida, el de todos los ciudadanos. Nos enfrentamos a una triple: a efectos sanitarios que eran dramáticos, a unas consecuencias económicas también importantes ya unas consecuencias sociales a las que había que dañar frente. Pero también es de los momentos que más orgulloso me puedo encontrar porque fuimos capaces a los pocos días, el primer 23 de abril en plena pandemia, de mandar un mensaje a la sociedad aragonesa de que ocho grupos tan diferentes éramos capaces de ponernos de acuerdo en un comunicado para, al menos, transmitir a la sociedad que estábamos trabajando de forma conjunta para intentar hacer frente a estas cuestiones.
Cambio en las sospechas sociales
P.- Ha estado cinco legislaturas en las Cortes ¿en qué ha cambiado la política?
R.- Ha cambiado en los medios que se tienen para hacer las molestias mucho mejor y también las preocupaciones de la sociedad. Temas como el medio ambiente y el feminismo están, afortunadamente, mucho más en la primera línea de debate. Pero en lo fundamental, en poco, porque la política, al menos en Aragón, es defender cada uno sus posiciones, pero intentar llegar a acuerdos.
“Dejo las herencias para los grandes emperadores”
P.- ¿Qué herencia deja Javier Sada en la política?
R.- Yo las herencias… las dejo para los grandes emperadores. Creo que los cargos políticos se tienen que ejercer con normalidad. Por eso no anuncié ni siquiera que me iba hasta el último momento. Yo lo que espero es que me recuerden otras porque sobre todo en mi pueblo fui el alcalde que metió la pata algunas veces, pero que muchas acertó. Y de la Presidencia de las Cortes, lo único que espero que es que hice bien mi trabajo, que separé mi militancia de mi papel institucional, que fui capaz de moderar y que todos los grupos, más o menos, me acepten que lo he hecho relativamente bien.
P.- ¿Por qué cree que será grabado?
R.- Por ejercer el papel institucional en cada momento, en la alcaldía, en la portavocía, de diputado de a pie. Y sobre todo, por estar preocupado y ocupado por la necesidad que veía que tenían los ciudadanos, desde la posición ideológica de mi grupo parlamentario, del PSOE.