Un poco de normalidad llegó a la ciudad de Sitges, en el noreste de España, el jueves por la noche, cuando cientos de voluntarios disfrutaron de una salida sin distanciamiento social por primera vez en más de un año como parte de un ensayo clínico.
Las autoridades municipales del hotspot turístico costero y la Generalitat de Catalunya organizaron el evento pionero para probar formas de revitalizar de forma segura el sector de la vida nocturna en medio de la pandemia Covid-19.
Se seleccionaron unos 400 voluntarios de 500 solicitantes para participar en la prueba, en la que los participantes tuvieron que realizar una prueba Covid-19 varias horas antes de que comenzara el evento.
«Como trabajo en el sector de la vida nocturna, estoy emocionado y espero que salga bien, después de esto, veremos qué pasa», dijo a Córdoba Noticiasel empleado del bar Kike Delgado tras hacerse su prueba.
Ninguno de los 405 participantes dio positivo por coronavirus.